El ñanduty

Categorías: La leyenda

Lean la siguiente leyenda con mucha atención:

 

El ñanduty

>> Hace mucho, mucho tiempo, el pueblo de Itaguá era sólo una pequeña iglesia con algunas casas a su alrededor.
Desde hacía poco, una de estas casonas estaba ocupada por un oficial del ejército español y su esposa María. Vivía con ellos Ibotí, una joven india guaraní de mirada vivaz y sonrisa franca, que se ocupaba de las tareas de la casa.
A María le costaba mucho acostumbrarse al nuevo país y de tarde en tarde, los recuerdos le llenaban el corazón. Entonces se sentaba en el patio, bajo la sombra de un frondoso lapacho, y le contaba a Ibotí cómo era su lejana y amada patria.
>>Pasó el tiempo y entre estas dos mujeres tan diferentes fue naciendo un profundo y sincero cariño. Una vez el esposo de María tuvo que emprender un largo viaje y quedaron solas en la casa; entonces el tiempo empezó a sobrarles. Cierto día a María se le ocurrió vaciar los baúles traídos de España y llamó a Ibotí para que le ayudara.
Entre las cosas que sacó al sol había una mantilla del más puro encaje de Tenerife: el recuerdo más querido de María. Aún escuchaba la voz de su madre, cuando aquella tarde, antes de partir para América, la puso en sus manos y le dijo:
–Cuídala con cariño y tendrás muchos días de dicha y felicidad, tantos como los que yo he tenido…
El tiempo había pasado y pasado desde aquel día y la mantilla estaba frágil y amarilla. Entonces María pensó que un poco de agua y jabón le devolverían la blancura perdida, se la dio a Ibotí para que la lavara y le recomendó que no la fregara demasiado.
Sin embargo, a pesar del cuidado que puso la muchacha, cuando la sacó del agua descubrió azorada que la mantilla estaba totalmente deshilachada. Mucho lloró María al enterarse de lo ocurrido y un mal presentimiento empezó a darle vueltas en la cabeza.
Los días siguieron pasando y no llegaban noticias del oficial español. Una tarde María volvió a recordar las palabras de su madre y desesperada pensó que algo le había pasado a su querido esposo. Desde entonces la tristeza ya no la abandonó, en silencio recorría la casa y apenas si probaba bocado.
Ibotí trataba de reanimarla pero todo era inútil. Una noche la muchacha tuvo un extraño sueño: los dibujos del encaje deshecho giraban y giraban ante sus ojos. Despertó sobresaltada y ya no pudo volver a dormir. Entonces pensó en hacer una mantilla igual y sin perder tiempo se puso a trabajar. Noche tras noche se sentaba frente al improvisado telar pero nada de lo que hacía la conformaba.
Ibotí estaba cada vez más inquieta porque María ya ni se levantaba de la cama. Un atardecer se sentó bajo el lapacho realmente preocupada y ahí se quedó, silenciosa, hasta que la luna comenzó su acostumbrado paseo nocturno por el cielo.
>>De pronto a su luz descubrió una pequeña arañita tejiendo su tela; los dibujos que hacía eran casi iguales a los de la mantilla deshecha y la muchacha se quedó absorta mirando el ir y venir del animalito. Después de un largo rato corrió a su habitación y se puso a tejer febrilmente.
Durante muchas noches Ibotí tejió sin descanso, hasta que una mañana el trabajo quedó terminado. Entonces con el corazón golpeando en su pecho y las manos cubiertas por el encaje, corrió a la habitación de María.
–¡¡Qué hermosa mantilla!!… ¿De dónde la sacaste, Ibotí? –preguntó conmovida.
–La tejí con mis manos. Es “ñanduty”, tela de araña –murmuró sonriendo la muchacha al notar que los ojos de María recuperaban algo del brillo perdido.
>>Y ocurrió que esa misma tarde por fin llegaron noticias del oficial español y la tristeza de María se alejó para siempre. En cuanto a Ibotí, hizo muchas mantillas y también enseñó a tejerlas a otras indias del pueblo.
>>Desde entonces, Itaguá es el lugar del Paraguay donde se hacen los más variados y hermosos tejidos de ñanduty.

Leyendas americanas, Paulina Martínez y otras (recopiladoras), Sigmar, Buenos Aires, 1980.

 

Actividades

a. ¿Cuál es el tema?
b. Situación inicial: ¿Cuándo ocurren los hechos? ¿A qué época aluden? Subrayen los datos que permitan identificarla. ¿En qué situación están los personajes?
c. ¿Dónde transcurre la acción?
d. ¿Qué personajes aparecen? Caracterícenlos.
e. ¿Cuál es la complicación?
f. ¿Cómo se resuelve?
g. Situación final. Enumeren los cambios producidos respecto de la situación inicial.
h. ¿Hay algún comentario o evaluación del narrador? ¿Cuál es?
i. ¿Qué tipo de narrador aparece? ¿En qué persona narra?
j. Anoten al costado del texto “El ñanduty” el nombre de cada una de las partes que lo componen. (Los símbolos  >> sirven de ayuda).
k. Toda leyenda trata de explicar el origen de algo. En este caso, el origen de ……………………………………

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1 Comentario

  1. Es muy largo pero está muy bueno.

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