Lee atentamente el siguiente relato:

 

Ha nacido un rey
Emilio Calle

Desde que descubrí la biblioteca secreta del rey Torpolar I, mi vida cambió por completo. Cada vez que disponía de unas horas libres, me sumergía en aquel millar de volúmenes. La ingente tarea de buscar el manuscrito de Juan Damas entre aquel mare mágnum de libros húmedos, y en muchos casos ilegibles, se convirtió para mí en una obsesión. Estudiando aquellos textos terminé por conocer todos los detalles de aquella época tan terrible conocida como las guerras negras; un tiempo de horrores y codicia, de infames y héroes. Quizás Torpolar I fue uno de esos últimos… Nació entre Semagua y Loberna, en las tierras de un poderoso señor llamado Domanor IV, al que todos conocían por sus peligrosas tendencias al asesinato indiscriminado. Casado desde adolescente con Sara de Dima, la vida de Domanor había transcurrido bajos las sombras siempre frías de las guerras negras, y su temor a morir sólo era comparable a su crueldad para los suyos. Desde que tomó posesión de sus tierras (tras la muerte de su padre, el antiguo regicida Bupo Nahuill), comenzó a ver como conspiradores a la mayoría de los miembros de su familia, lo que no hizo sino aumentar el ritmo de ejecuciones. Hermanos, sobrinos, tíos o cualquier otro que se le antojase peligroso era encerrado de por vida o ejecutado en el pozo de los Deseos. Hasta tal punto llegó su locura que, tras conocer la noticia de que su esposa estaba embarazada, juró que el niño no viviría ni un solo día porque no quería traidores entre sus vástagos. Como el amor que sentía por su esposa le impedía quitarle la vida, dijo que esperaría a que el niño naciera para arrojarle de nuevo fuera del tiempo de los hombres. Sara, espantada, le pidió de mil formas distintas clemencia para el hijo de ambos, pero él como única respuesta se limitó a nombrar un ejecutor. Sara, entonces, escribió a su hermana Diana (que vivía en un pueblo costero a cuatro días de camino) y le pidió ayuda. Juntas urdieron un plan que terminó de forma trágica… Todo el embarazo de Sara transcurrió bajo los ojos atentos de una vigilancia escrupulosa mandada por el demente Domanor. En las últimas semanas, Sara, encerrada en sus aposentos, guardó un empecinado silencio que sólo rompió cinco días antes del parto. Un día, después de una visita de su hermana, ella pareció volverse loca. Agredió a su marido y trató de matarlo. Él la encerró en una habitación vacía del castillo y no permitió que nadie la visitara, excepto un carcelero que le llevaba comida tres veces al día. Una noche, los guardianes que custodiaban la puerta oyeron los llantos de un niño y corrieron a llamar al rey. Cuando éste entró en la habitación no pudo dar crédito a sus ojos. Sobre el suelo yacía diseminada la capa de un soldado. Sara oraba en silencio. La ventana estaba abierta al abismo, de par en par, y por ella entraba una tormenta nocturna. Pero del niño, ni rastro… mandó que decenas de jinetes corrieran en pos del pequeño y su custodio, pero, por supuesto, todo fue inútil…

Actividades

Antes de leer la solución:

1. Según tu opinión:

a) Domanor, ¿tenía razones valederas para querer matar a su descendiente? Explica.
b) Torpolar, ¿ tenía razones valederas para desconfiar de todo el mundo? Explica.
c) ¿Cómo crees que te hubieras comportado de haber estado en el lugar de cada uno?

2. ¿Cómo crees que hizo Sara para salvar a su hijo recién nacido de un fatal desenlace?
3. Ahora, lee el final del relato:

Solución:

Está claro que el rey, con sus facultades mentales totalmente perturbadas, no supo comprender la verdadera realidad de lo ocurrido. Para él, un soldado traidor había escalado la muralla para llevarse al niño. Pero el niño estaba ya lejos. Sara, con una audacia impropia, había trabajado en un plan, junto a su hermana, que ambas pusieron en marcha justo cuando el niño había venido al mundo, porque en realidad el pequeño nació unos días antes de la fatídica noche. Amparadas en el secreto, ocultaron el parto de la mejor manera posible. Sara simuló una barriga con las ropas de un soldado (hecho que posteriormente haría creer a su marido que el traidor estaba entre sus hombres) y, justo cuando su hermana se marchó llevándose al pequeño, se fingió loca para que la encerraran. Esperó cinco días, porque ese era el tiempo que su hermana necesitaba para llegar hasta la costa y desde donde, probablemente, el pequeño sería embarcado hacia un lugar totalmente seguro. Luego, fingió un parto e imitó la voz de un niño, abrió la ventana, se despojó del disfraz de su vientre y esperó orando la llegada de su marido. Este, incapaz de contener su furia, mató a la mujer y, creyendo que uno de sus hombres acababa de huir llevándose al pequeño, dio decenas de órdenes inútiles que tan solo lograron que el tiempo de huida jugase en favor del pequeño… Torpolar creció a salvo, y cuando volvió a su hogar, el terror y la desdicha no harían más que comenzar.

Luego de leer la solución:

4. ¿Coincidieron tus hipótesis con la solución que escribió el protagonista?
5. ¿Estás de acuerdo con la solución del protagonista? Explica.
6. De acuerdo a lo que pudiste entender, ¿cuál es el tema del relato?

 La ambición.
 La locura.
 El amor de una madre.
 La incapacidad de gobernar.
 La corrupción que causa el poder.
 El miedo a perder todo.
 La desconfianza.
 La inseguridad.
 El destino.
 El poder.
 Ninguno de los anteriores, para mí es …………….. porque …………..

7. ¿Qué enseñanza se puede sacar de esta trágica historia de dos reyes?

 

Otras actividades

1. Lee el relato junto a un diccionario. Extrae las palabras que no comprendas y arma con ellas un glosario para el texto.
2. En grupos de 4 ó 5 imaginen y redacten la solución o desenlace de la historia.
3. Cada grupo leerá su propuesta y la clase elegirá la que considere más adecuada.
4. Luego de que el profesor lea la “Solución” para toda la clase, comparen el desenlace elegido por todos con la solución propuesta por el autor. Discutan sobre los puntos que le parezcan diferentes.

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